Para la asociación civil Expresión Libre, Comunicadores para la Paz y la Democracia, el gobierno nacional no cesa en su empeño de restringir los espacios para la información y opinión, según se desprende del procedimiento administrativo abierto contra el canal de noticias Globovisión, el primero desde que la planta cambió de propietarios.
De acuerdo con el criterio de esta organización nacional integrada por periodistas y comunicadores, nada justifica este procedimiento iniciado por Conatel a raíz de una emisión del programa “Caso de Investigación”, destinado a informar, en la voz de los propios ciudadanos, sobre el desabastecimiento y la inflación cuando esa es la difícil realidad que están viviendo los venezolanos día tras día.
“Visto su ostensible fracaso en materia económica y alimentaria, el gobierno nacional no puede seguir escudándose tras las acusaciones contra los medios o con su campaña sistemática contra los productores y asumir su responsabilidad en esta crisis”, afirmó Silvia Alegrett, Coordinadora General de Expresión Libre.
Agrega que esta medida contra Globovisión dice claramente que el actual gobierno nunca va a aceptar la crítica, las voces disidentes, ni cualquier visión informativa, por más objetiva que se pretenda, si no concuerda con la percepción oficialista, los intereses del partido de gobierno y las tesis del proyecto revolucionario.
“Lo que está ocurriendo es sumamente grave para la democracia venezolana y el futuro de nuestra sociedad. Se quiere silenciar a los periodistas, a los medios, al periodismo libre que es decir también al ciudadano de a pie, hoy presa de las angustias por la falta de alimentos, la inseguridad en las calles y la crisis asistencial, entre otros males que lo aquejan”, afirmó la representante de Expresión Libre.
En momentos como los que vive Venezuela, subrayó Alegrett, es cuando más se necesita de las informaciones que ofrecen los medios y que los periodistas profundicen en las causas de lo que están aconteciendo, “pero eso es precisamente lo que teme y lo que definitivamente quiere impedir el gobierno con su política de amedrentamiento contra los medios de comunicación, cada vez más brutal”.
“Esta situación que afecta el flujo informativo del país se ve agravada por el ocultamiento y la deformación que hace de la realidad todo el andamiaje comunicacional del costosísimo e inútil Sistema Bolivariano de Comunicación e Información (SIBCI), dedicado las veinticuatro horas del día a hacer propaganda ideológica y electoral, lo cual es una de las formas más perversas de la corrupción que supuestamente el señor Maduro quiere combatir con una Ley Habilitante, absolutamente innecesaria”, enfatizó Alegrett.
Finalmente exhortó a periodistas y comunicadores y a la ciudadanía en general a intensificar el uso responsable de las redes sociales que cada vez cobran más importancia en el marco de constreñimiento al que están siendo sometidas las libertades de expresión e información en Venezuela.
Caracas, 2 de octubre de 2013